
El poder de la comunidad · Núm. 8
Construyendo poder
Esta guía ofrece maneras concretas de conectar con otras personas, tomar acción significativa y contribuir a cambiar los sistemas que moldean su vida y su comunidad.
A lo largo de la serie Poder en Comunidad, hemos analizado las fuerzas profundas que influyen en la salud, las oportunidades y el sentido de pertenencia en Colorado. Estos desafíos no son solo resultado de situaciones individuales. Muchos surgen de sistemas que, durante generaciones, han excluido o desatendido a personas por su raza, ingresos, estatus migratorio, idioma o lugar de residencia.
Hemos visto cómo el legado de la segregación residencial aún limita el acceso a la vivienda. Cómo se toman decisiones sin contar con la participación de quienes más se ven afectados. Cómo la falta de inversión pública debilita los espacios donde la gente se reúne. Cómo trabajadores por encargo y jóvenes quedan sin apoyo en sistemas que no fueron diseñados para ellos.
Pero también hemos visto a personas en todo Colorado luchando por el cambio. En todo el estado, residentes están recuperando el poder: co-creando espacios comunitarios, promoviendo mejores políticas y construyendo nuevos modelos económicos. Muchos de estos esfuerzos cuentan con el respaldo de organizaciones que escuchan atentamente e invierten en soluciones lideradas por la comunidad.
Este capítulo final es una invitación a reflexionar y a involucrarse. No necesita un título, ni experiencia política, ni un micrófono para marcar la diferencia. La participación cívica comienza con conocimiento local y acción colectiva. Todo empieza cuando creemos que nuestras voces importan aquí.
¿Qué papel podría asumir usted?
Caminos para actuar y generar cambio
El poder comunitario no proviene de títulos ni de instituciones. Proviene de nuestras decisiones, nuestras acciones cotidianas y nuestras formas de colaborar. Las personas construyen poder cuando entienden cómo funcionan los sistemas y reconocen que tienen la capacidad de moldearlos. Estos caminos ya están activos en Colorado, y cualquiera puede sumarse.
1. Repensar cómo se ve el poder
El poder no siempre se muestra con un escenario o un cargo oficial. Puede verse en una vecina que organiza un grupo de mensajes para su calle. En un familiar que siempre se asegura de que haya comida para todos. En un estudiante que lidera una colecta de abrigos en la escuela.
Cuando enfrente un problema o una decisión que afecta a su comunidad, deténgase y cuestione la creencia común de: “No hay nada que yo pueda hacer”. En vez de eso, desafíe esa idea. Puede que alguien ya esté trabajando en ello—o tenga una idea que valga la pena fortalecer. Su perspectiva importa.
Pregúntese:
- ¿Qué está pasando realmente, más allá de lo visible, y a quién afecta más?
- ¿Qué fortalezas existen ya en mi comunidad que podrían ayudar? Considere personas, lugares, tradiciones y soluciones creativas que ya están en marcha.
- ¿Hay líderes, grupos o vecinos ya trabajando en esto? ¿Cómo lo hacen?
- ¿Quién más se preocupa por esto y qué pequeña acción podríamos emprender juntos?
Estas preguntas ayudan a superar la frustración al revelar los sistemas detrás de los problemas cotidianos—y los recursos que ya existen a su alrededor.
Pero prestar atención es solo el principio. El siguiente paso es conectar con personas que se están haciendo las mismas preguntas y quieren actuar. Ahí es donde empieza a crecer el poder. Ya sea iniciando una conversación en casa, compartiendo información en un grupo de WhatsApp o preguntando “¿Quién más debería estar aquí?”, usted está contribuyendo a generar conciencia—y con ello, el potencial de un cambio real.
El mensaje de esta serie es simple: el poder no aparece por sí solo. Lo crean las comunidades, muchas veces a través de pequeños actos de conciencia y la decisión de mantenerse involucradas.
2. Infórmese y manténgase conectado
El conocimiento genera poder, especialmente cuando se trata de su comunidad. Cuando usted entiende quién toma decisiones donde vive y por qué, es más fácil participar e influir.
No tiene que ser experto en políticas públicas. Comience prestando atención a personas y grupos que ya están impulsando el cambio. Algunos buenos puntos de partida:
Siga medios locales y comunitarios
Colorado cuenta con medios confiables enfocados en temas como vivienda, salud pública y justicia social.
- El mapa de medios de COLab puede ayudarle a encontrar periodistas locales: colabnews.co/colorado-news-mapping-project
- Colorado Ethnic Media Exchange (CEME) destaca medios liderados por comunidades BIPOC: ethnicmedia.co
Use su biblioteca pública
Las bibliotecas ofrecen mucho más que libros. Muchas funcionan como centros comunitarios, donde puede conocer a vecinos, obtener información confiable y encontrar apoyo. Por ejemplo, la Biblioteca Pública de Denver ofrece clases de inglés, asesoría legal para inmigrantes, orientación empresarial y acceso a bases de datos de noticias. Visite el sitio web de su biblioteca local; podría sorprenderse con lo que ofrecen.
Deje que los grupos de defensa lo guíen
Si hay un tema que le importa, busque organizaciones locales que trabajen en él. Muchas publican actualizaciones frecuentes sobre políticas, eventos y recursos que no suelen aparecer en los medios tradicionales. También suelen compartir informes detallados sobre sus áreas de enfoque.
Busque por tema y ubicación, por ejemplo: “derechos de inquilinos Denver” o “salud mental juvenil Pueblo.” Una vez que encuentre grupos afines, sígalos en redes sociales para mantenerse informado.
Cuando sabe cómo se toman las decisiones—y quién las toma—usted puede hablar, involucrarse y actuar con conocimiento. Entender lo que pasa a su alrededor es una de las maneras más efectivas de empezar a hacer una diferencia.
3. Estar presente importa
No necesita hablar en un micrófono para hacer una diferencia. A veces, la acción más significativa es estar presente, incluso si solo escucha.
Cuando los residentes asisten a reuniones públicas, aunque no hablen, envían un mensaje: estamos prestando atención. Nos importa lo que pase aquí.
Ese tipo de presencia puede cambiar el tono de una reunión. También brinda respaldo a quienes deciden alzar la voz. Así ocurrió en los barrios de Globeville y Elyria-Swansea, en Denver, donde miembros de la comunidad—incluidas personas de GES Coalition y Tierra Colectiva—se organizaron, asistieron a reuniones y exigieron un desarrollo que respondiera a sus necesidades. El resultado fue un proyecto de vivienda y biblioteca que reflejaba sus prioridades y fue protegido mediante un fideicomiso comunitario.
¿Quiere hacer algo parecido en su zona?
Empiece consultando los calendarios de reuniones públicas en su ciudad, condado o distrito escolar. Muchos ofrecen la opción de asistir en línea. Busque:
- “[Nombre de su ciudad] reuniones del concejo municipal”
- “[Nombre de su condado] agenda de reuniones de comisionados”
- “[Nombre del distrito escolar] reuniones de la junta escolar”
No necesita ropa especial ni conocer todas las reglas. Solo traiga su atención. Y observe quién no está presente. ¿Faltan inquilinos en una reunión sobre normas de vivienda? ¿Están incluidas las personas con discapacidad o quienes no dominan el inglés en la planificación de salud? Ver esas ausencias es el primer paso para llenarlas.
Su presencia importa, incluso si solo se sienta al fondo. Y cobra aún más fuerza si regresa la próxima vez.
4. Comparta experiencias como la suya
Su historia personal es importante—y también es una forma de evidencia. Al compartir lo que ha vivido, usted aporta algo que los datos numéricos no pueden mostrar. Ayuda a quienes toman decisiones a entender qué funciona, qué no, y por qué es relevante. También hace que otras personas en su comunidad se sientan menos solas.
Algunas maneras de comenzar:
Cuente su historia a su manera
Puede hablar en una reunión pública, pero también hay otras opciones. En Colorado, muchas organizaciones invitan a residentes a compartir sus experiencias para influir en políticas y reducir el estigma.
- La Red de Bienestar Mental de Colorado recopila historias de recuperación para mejorar el apoyo a la salud mental.
- La Campaña Infantil de Colorado apoya a jóvenes y padres para que hablen sobre temas que afectan a sus familias.
Algunos grupos aceptan testimonios anónimos—una alternativa útil si aún no se siente listo para compartir su nombre o historia públicamente.
Participe en encuestas
Responder encuestas clave puede generar cambios concretos:
- La encuesta Pulse de Colorado Health Foundation ayuda a establecer prioridades estatales.
- La Encuesta de Acceso a la Salud en Colorado (CHAS) guía decisiones de financiamiento.
Los gobiernos locales también publican encuestas temáticas, como la que ayudó a diseñar un nuevo parque en Clifton. Son formas sencillas y de bajo riesgo para asegurar que su voz sea tomada en cuenta.
Súmese a la conversación
Cuantas más personas hablan con sinceridad sobre lo que ocurre en sus comunidades, más se avanza hacia el cambio. No hace falta ser ruidoso para hacerse notar. Puede:
- Responder una pregunta en una encuesta
- Hacer una consulta en una reunión comunitaria
- Contarle a alguien de confianza por lo que está pasando
Cada vez que habla con honestidad, ayuda a otros a hacer lo mismo. Esos momentos, aunque parezcan pequeños, construyen poder colectivo y abren camino al cambio.
5. Involúcrese con organizaciones locales
Las organizaciones comunitarias suelen ser el motor del cambio duradero. Están arraigadas en sus comunidades, dirigidas por personas que conocen el entorno local y enfocadas en lo que funciona y en lo que necesita mejorar. Ya sea capacitando a inquilinos sobre sus derechos, promoviendo cambios en políticas públicas o gestionando programas extracurriculares, saben cómo transformar el esfuerzo en impacto.
Por ejemplo, la Community Language Cooperative ofrece servicios de justicia lingüística, programas comunitarios y capacitación que ayudan a las personas a participar plenamente en la vida cívica y a expresarse en el idioma con el que se sienten más cómodas.
No existe una única forma de contribuir. Aquí le damos algunas ideas para empezar:
Comience con un tema que le importe
Ya sea vivienda, educación, medio ambiente o derechos de personas migrantes, probablemente haya un grupo local trabajando en esa área. La mayoría recibe con gusto a nuevas personas, sobre todo si están dispuestas a aprender.
Ofrezca lo que ya sabe hacer
No necesita ser una persona organizadora profesional. Tal vez se le da bien el diseño gráfico, la difusión comunitaria o la traducción. Quizá puede ofrecer transporte, colaborar en eventos o conversar con vecinas y vecinos en su edificio. Lo que usted aporta puede fortalecer los esfuerzos del grupo.
Además, usted también gana. Conocerá a personas con intereses similares, aprenderá más sobre su comunidad y creará vínculos significativos. Cuantas más personas se involucren, más fuerte se vuelve nuestro poder colectivo.
6. Trabaje por un cambio más profundo
Algunos cambios comienzan de forma informal—a través de chats vecinales, redes de alimentos compartidos o reuniones comunitarias espontáneas. Pero los cambios más grandes y duraderos suelen requerir que las personas se integren a los espacios donde se toman decisiones.
En todo Colorado, personas comunes están asumiendo estos roles. Empiezan haciendo preguntas y asistiendo a reuniones. Con el tiempo, ayudan a dar forma a las políticas y prioridades públicas.
Este tipo de liderazgo no siempre comienza con un cargo oficial. Suele comenzar con ánimo y acompañamiento—sobre todo para quienes históricamente han quedado fuera de los espacios formales de toma de decisiones. Esa es la razón de ser de programas como el Collective Leadership Initiative, respaldado por The Colorado Health Foundation. Fue creado para personas que han vivido inequidades y quieren mejorar sus comunidades.
Las y los participantes desarrollan habilidades prácticas como hablar en público, organizarse en grupos y navegar sistemas complejos. Exploran qué significa la equidad en sus propios contextos y trabajan para concretarla. Muchas personas luego lideran proyectos, influyen en decisiones locales o integran juntas directivas. Estos programas no solo forman líderes individuales—también amplían nuestra visión colectiva de quién puede liderar.
¿No sabe por dónde empezar?
Revise si su ciudad, condado o distrito escolar tiene vacantes en comités asesores, grupos de trabajo o juntas locales. Observe cómo se toman las decisiones y quiénes ya están participando. Contacte a alguien cuyo trabajo admire. Tal vez esté más cerca de un rol de liderazgo de lo que piensa.
Como dijo el Dr. Leo Kattari de CHF en una entrega anterior de esta serie: “Las personas electas son residentes comunes de Colorado a quienes se eligió para servir. Usted y yo también podemos ser esas personas.”
7. Participe de formas que se sientan seguras
Para algunas personas en Colorado, participar públicamente en esfuerzos comunitarios puede implicar riesgos. Esto puede deberse a su estatus migratorio, al temor de represalias o discriminación, a inestabilidad financiera o a experiencias pasadas difíciles.
Aun así, existen maneras seguras y significativas de involucrarse. Algunos ejemplos:
- Apoye detrás de escena. Puede ofrecer habilidades valiosas como diseño, traducción o investigación a organizaciones que trabajan directamente con la comunidad.
- Comparta información confiable. En grupos de WhatsApp, chats comunitarios o redes sociales privadas, la información útil se difunde rápidamente a través de personas de confianza.
- Colabore con organizaciones que priorizan la seguridad. Grupos de apoyo legal como el Community Economic Defense Project (CEDP) ayudan a las personas a ejercer sus derechos de manera que reduzca los riesgos. Estas organizaciones pueden servir de puente entre la ley y la experiencia cotidiana.
- Comparta su historia de una manera que le resulte cómoda. Si ha enfrentado discriminación, inseguridad habitacional o exclusión, su historia importa. Muchas organizaciones recopilan testimonios de forma anónima o confidencial, para que las personas puedan contribuir sin exponerse.
Un movimiento por el cambio necesita de muchos tipos de roles: personas cuidadoras, constructoras, artistas, analistas, narradoras, protectoras y organizadoras. A veces, simplemente implica ser la persona en quien su vecina confía. Lo importante es elegir una forma de participación que le resulte segura—y seguir presente desde ahí.
Reflexionar sobre el poder comunitario en acción
Los sistemas que afectan nuestras vidas—quién accede a la vivienda, a la salud, a oportunidades o a espacios de decisión—no surgieron por casualidad. Fueron construidos por personas. Y pueden ser reconstruidos por personas también. Eso le incluye a usted.
El poder comunitario no se trata de tener todas las respuestas ni de ser quien más habla. Se trata de reconocer lo que hace falta, saber lo que usted puede ofrecer y mantenerse conectado con algo más grande que uno mismo. Su papel puede cambiar con el tiempo, pero siempre habrá una forma de contribuir.
Incluso en momentos difíciles, personas en todo Colorado siguen dando un paso al frente. Lo hacen con el apoyo de organizaciones como The Colorado Health Foundation y los proyectos locales que financia—esfuerzos que no solo protegen a las comunidades, sino que también imaginan nuevos futuros.
Elija una acción. Dé un paso. Porque el cambio ocurre cuando nos movemos.
Esta serie es presentada por The Colorado Health Foundation, que trabaja en todo el estado para mejorar la salud mediante inversiones comunitarias e incidencia en políticas públicas. Más información en coloradohealth.org.
Producido en colaboración con Angle Content & Strategy, un estudio de contenido enfocado en proyectos con propósito, y distribuido junto con el Colorado Ethnic Media Exchange para llegar a comunidades en todo el estado.
Créditos de imagen: Foto de cabecera de Sincerely Media vía Unsplash. Imágenes integradas generadas con ChatGPT (OpenAI).